domingo, 19 de abril de 2020

6 poemas de Raúl Brozovich


EN LA DÉBIL ASPEREZA DEL CUARTO

la hoguera quema su lienzo de noche oscura
aunque esté adelante unos pasos
yo te esperaré
no llores
el amor es siempre triste de renunciar
camino por las calles soñando
palabras que tiemblan su fuego interior
—de inocencia pura yo muero—
si algún día yo te puedo encontrar
una moneda falsa
un par de zapatos nuevos
el silencio claro como una estrella
el mar abierto del paraíso azul
poblado de imágenes muertas
el sueño
la música mueve sus alas
las aguas densas del olvido borran tu rostro
en vano compro manzanas amarillas
un cesto de pan negro
la gigantesca amapola tornasolada
muere
en la débil aspereza del cuarto



HAY VAGUEDADES DE ÓSCULOS DE MUERTE

cenizas
manos envenenadas de perfumes
huertos arrasados —cartas tenues
donde el amor flota como un silencioso cadáver
plúmbeo de azucenas y espejos largos
y sonetos
¡oh! soledad que todo lo aniegas —naufragio
alto ramo alzado para la muerte
devuélveme su rostro nostálgico
pensativo
su densa cabellera de humo y pecado
el pálido marfil de sus manos pequeñas
el cuerpo y su imagen palpitante
y veneno.



EN LA ESPESURA DEL SUEÑO

el poeta sueña a orillas del río Guadalviquir
el agua sonora corre por sus venas
agua verde —extendida para mi oído
en la espesura del sueño
golpeada en su pétalo y su nervadura
sudorado cáliz de espuma
ay cabeza oscura y rota de esta vida
ay dolor quieto como una piedra
flaco rumor en las sienes
ave negra
culebra
espina
dulce herida
el agua tiembla al pasar por mi vida
el agua verde sueña
tendido yo en la oscura
hierba
agricultor de especies puras
mezcla de minotauro y ave
el poeta bebe el vinagre
de las oscuras cavilaciones
es el tiempo —madriguera de la sierpe
cónclave de las estaciones perdidas
dura piedra —donde reposa su cadáver congelado
es también cometa y diamante
del volumen de la rosa
imagen y transparencia
su metáfora delicada
o es también de los viñedos del poeta
sapos y lebreles
—mezquina bolsa— siempre vacía.



RUINAS DE MACHUPICCHU

tiempo detén tus alas de frágil nervadura
baja a lo profundo de esta noche estelar
y de nuevo, sube conmigo a explorar
lo desconocido;
tiempo, detén tus alas de águila inmortalizada
por el bastón de la nieve pura, y llévame
hacia la noche
de tu vorágine impelente, que nada quede
del espíritu.
como una lámpara, tus manos de oscura ceniza,
remueve y descubre
el secreto enigmático de la piedra labrada,
corona de alta hierba el rostro antiguo del Perú
háblame con tus ojos de niebla enrarecida
junto a mi oído tus pasos de vicuña salvaje.

yo vi
la tierra en flor, su combatida cintura, poblada
de maíz y pájaros
donde entonces el hombre, dejó sus vestigios
americanos
tierra que labrasteis, piedra, oro finisecular
plata enmohecida, vasija de barro que ostenta
de la muerte
los dibujos ornamentales de la vida.

yo vi
la temblorosa orquídea del amor, elevar su canto
de amarillas
vestiduras — su lento origen de agua transformarse
en violencias
inusitadas resbalar hacia el cofre oscuro
de las selvas virginales.
entonces hacia dónde aquellas palabras volaron
de polen en polen, en la boca del pueblo
hacia dónde su tristeza encantada
tálamo y pedernal, guerrero dormido, hondero
de la noche
bastión de la montaña.

yo vi
resbalar en la soñada arquitectura del aire
una estrella de piedra coronarse en tu frente.



A LA MUERTE YO LE ARROJO TOMATES

masticando vidrio molido
viene la muerte           temblando                   entre dos
olvidos
abatiendo una lenta atmósfera de claveles
y sonetos
le siguen en orden
paraguas y cocodrilos
un río violento de rosas frescas
huesos de madera
ángeles con un pie ensangrentado viudas
apasionadas
bueyes de negra luna jabonada
locomotoras,
yo soy solo como un edificio a su encuentro
con un revólver y un cesto de tomates podridos
hago puntería
1 2 3 4 5 6
su corazón roto cae como un frasco envejecido
huye de pronto
con una secuencia de cinematógrafo mudo
arrolla niños y tempestades
crepúsculo de última moda
rosas perfumadas
panaderos
fabricantes de pomada
y finalmente dactilógrafos
7 8 9 10
junto al semáforo — huelo su vaga sombra
de azufre calcinado
levanto la nariz al cielo color mandarina
ALLA ESTAAAA A A A A ¡ ¡ ¡! ¡ ! ¡ ! ¡ !
mírenlo abre bocas y protecultos
vuela como un periódico arrebatado llevándose
los editoriales de mi primer asombro.



HOMENAJE A IGOR STRAVINSKI

a propósito de la consagración de la primavera
boca furiosa del sonido           agria primavera
que la sombra de las manzanas muerde
dulce planeta extraviado
suicidio catastrófico de los instrumentos
sordo
rumor
inestable
cuando a solas a media noche
estrangulas todo el medio día posible
y el caballo de la furia            y sonido
sale desbocado
nadie sueña
nadie escucha
en medio
de tu insólita penumbra
entonces inauguras      el escándalo
de martillos      y      trombones
una       sacudida       atmósfera       de       claveles
agujereados
circula
por tus avenidas       de cemento y fuego
entonces
turbios ángeles    melancólicos
caen
derrotados
llenos de sangre
caen hacia el abismo de tus dedos
piano loco
demonio triste de la música abstraída
vienes
hacia el orgasmo
de la mariposa y el vino
acá en nuestra mesa
de pan
inauguras
la tempestuosa consagración de la primavera.



Raúl Brozovich Mendoza (Cusco 1928-2006) «yugoslavo por línea paterna e incaico por línea materna». Entregó sus primeros escritos en Exposición de la Poesía Contemporánea Cuzqueña (1958). Luego le siguieron Poemas (1969), Los versos del gran capitán (2003) y El duro oficio de vivir (2006), antología póstuma que recoge siete colecciones de poemas entre los años 1950 y 2004. Poeta, pintor y dramaturgo. Participó en las luchas sociales de Bolivia en 1960. Helena Usandizaga, crítica literaria española, escribe en un artículo que en el Cusco de fines de los 60: «Raúl Brozovich se pasea con Jack Kerouac por la plaza de Armas». Vladimiro Herrra en una pequeña nota escribe que «Raúl Brozovich no sólo condujo a Pablo Neruda a Machupicchu. No sólo comía helados con Jack Kerouac en la plaza de armas del Cusco. Fue candidato a diputado por el Partido Comunista y se burlaba de los feligreses desde la torre más alta de la catedral». Mario Pantoja apunta sobre su poesía que «Brozovich representa esa voz definida de la generación del 60, como también el difícil equilibrio entre el lirismo íntimo y la emoción social del “subversivo de la palabra” y bohemio por naturaleza». Sus referentes más cercanos son Maiakovski, Vallejo, Neruda, Whitman, Tagore, Verlaine, Rimbaud, Nieztche, Pound, Kavafis, Seferis, Dylan, Basho. Para él «la poesía es apenas un sueño errante».

Libros: Exposición de la Poesía Contemporánea Cuzqueña (Cusco: 1958); Poemas (Cusco: Ediciones Elemento, Colección Vigencia, 1969); Los versos del gran capitán (Cusco: Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional San Antonio Abad, 2003) y El duro oficio de vivir (Contiene siete series de poemas: La Rosa Blindada 1950-1956; Fábrica de Sueños 1957-1963; Del Cielo bajó un Extraño Resplandor 1964; Vallejianas 1965-1968; Poemas Populares 1969-1987; Pintura en Negro y Blanco 1992-1996; Pop Art 1997-2004. Prólogo de Mario Pantoja. Cusco: Universidad Nacional San Antonio Abad, 2006); Poemas encontrados (Cusco: Auqui, 2014).


El duro oficio de vivir fabricando una palabra es un documental sobre Raúl Brozovich y Luis Nieto realizado por Auqui Paucar y David Peláez:




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