La poeta amazónica Ana Luisa Ríos González presenta su poemario ANEN. Conjuro al viento en la FIL Lima el 30 de julio a las 15h Sala Laura Riesco. Comentarios de Martiza Villavicencio y Cucha del Águila.
Anen1
El viento susurra en las
rendijas
y acaricia el vuelo de una
mariposa,
los astros meditan a lo
lejos,
despiertan con el canto azul
del sui sui.
Hormigas en fila anuncian la
lluvia fresca,
luego nadan desesperadas en
los charcos.
Aparece un arcoíris y se
guarece la mujer shiijam
Mientras el sol reverbera
con las pestañas al aire.
Aletea un jempe tornasol,
enamorado colibrí,
con sus vuelos esplendentes
en las flores encarnadas,
lleva mensajes de amor a las
heliconias
y a las blancas flores del
floripondio toé.
Distante viaja, por los
ríos, un hombre solitario
va en busca de alimentos
para su casa.
Una bella mujer abraza al
ocaso
en la chacra, en el monte,
en el fresco río
y en la casa silenciosa de
madera.
Canta un conjuro de amor
para que él vuelva,
a su regreso danzarán como
picaflores,
sin anillos ni turbantes ni
falsas proclamas:
solo amor se prometen bajo
el cielo estrellado.
1
Canto ancestral del pueblo Awajun, de carácter mágico-religioso.
Vasijas
Concha rayada de tortuga o
motelo,
estrella encendida «yaya»,
lianas dispersas como
cabellos,
verdes y sinuosas
madreselvas,
negras patas con memoria de
cangrejo,
son blancas líneas de un
bostezo,
telarañas encubiertas en
silencio.
Luna de rostro como hueso,
caras pintadas con huito
fresco,
tonadas de un sol un poco
muerto,
lluvia en el campo fresco,
azulinas nubes,
vaho interminable, lecho del
viento,
son los trazos envolventes y
mágicos
el cosmos que despierta en
las vasijas albarosas.
Yuca
awajún
Cultivamos la yuca sagrada
que nos salva la vida,
en parcelas, en chacras, en
el centro del monte
y en la parte más preciosa
del corazón.
Somos hombres y mujeres
hechos de fibras ancestrales
que caminan por el bosque
y van por los aires, como
féculas de almidón,
a toda la humanidad.
Somos el agua de las cochas,
la multitud de peces dorados
que saltan sobre el río,
las infinitas aves que
inician la jornada
con gorjeos y cantos que
anuncian el alba,
todavía en la oscuridad del
amanecer.
Somos la selva que siempre
comienza,
los otorongos sigilosos, el
calor del sol.
Lagarto
negro
Interminable como una noche
triste
se desliza un relámpago
sobre el limo,
chapotea en las orillas
cenagosas de los barrizales,
lanza coletazos de furia,
rasga el aire
y danza la muerte con la
vida.
Regresa a las aguas negras
o a las pendientes abruptas,
solitario se oculta en los
troncos flotantes,
con incansable paciencia de
cazador mitayero
espera a las incautas
presas,
ingenuos animales que salen
a beber en las colpas,
bajo la suave caricia de la
luna plateada.
Centelleantes dientes de
innumerables filas,
ojos de fuego, filudos
cuchillos, ascuas.
Los hombres y mujeres le
temen,
¿Será salvaje este lagarto
negro que se defiende?
¿o el hombre de la ciudad
que lo mata?
Playa
Tibi
Nací en Playa Tibi y crecí
entre las garzas
buscando huevos de taricaya
y también de tortuga,
las crecientes del río se
llevaron esas tierras.
Mis papeles dicen que nací
en Nauta,
pero mis ancestros son de
todas partes,
aunque yo creo que nací
libre como las garzas.
Tuve una abuela de piel
oscura y cabellos de luna
que vino tal vez de
Esmeraldas
y murió abandonada donde
nunca supe,
tuve un abuelo blanco que
vino de las Españas.
Por mis venas corre, aunque
mi gente lo calla,
sangre originaria, tal vez
Mayoruna o Kukama.
Hablo el castellano
amazónico y el de todas partes,
me encantan las fiestas de
los animales y la fiesta de las frutas.
A veces vuelvo al lugar
donde quedaba Playa Tibi
y me quedo mirando, por
horas, las aguas mansas del río
Ana
Luisa Ríos González. Nauta (Loreto), 1977. Licenciada en Educación,
Lengua y Literatura, por la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana.
Estudió las maestrías en Estudios Amazónicos y Escritura Creativa en la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos, y el diplomado en Gestión Cultural
con Enfoque en la Literatura en el Instituto Runa de Desarrollo y Estudios de
Género. Fue secretaria técnica de la Mesa de Concertación para la Lucha Contra
la Pobreza y miembro del Foro Educativo en Loreto. Trabajó en AIDESEP y en el
Programa de Formación de Maestros Bilingües de la Amazonía Peruana. Publicó el
libro de cuentos infantiles Travesuras amazónicas.