martes, 22 de junio de 2021

Un espacio de redescubrimiento. Crónica sobre el Seminario-taller Narradoras peruanas de los 80 y 90 (del 11 al 27 de mayo 2021), Por Lisandro Solís Gómez

 

Patricia de Souza

Dentro de las discusiones habituales que surgen en el ámbito de los estudios literarios, el debate en torno a la constitución del canon es una constante. Cuando se trata de ampliar las fronteras de esa selección de autores fundamentales, sobre todo, las valoraciones oscilan entre lo que cada lector considera relevante. Sucede, por ejemplo, en el caso de la narrativa escrita en la década de los ochenta. Difícilmente se discutirá el puesto que ocupan autores como Guillermo Niño de Guzmán, cuyo libro de cuentos Caballos de medianoche (1984), que incluye en su primera edición un prólogo de Mario Vargas Llosa, es considerado, casi por unanimidad, un “clásico” de las letras peruanas, no solo por su elevada factura, sino por su posición liminar en el proceso de transformación de la narrativa urbana. No sucedió así con la obra de otros escritores como Cronwell Jara Jiménez, Premio Casa de la Literatura Peruana 2019, quien solo en los últimos años viene siendo revalorado, pese a que su relato más celebrado Montacerdos se remonta a 1981. 

No obstante, en el caso de las narradoras que comenzaron a publicar en esa misma década y la siguiente, la valoración de su aporte al devenir de la narrativa peruana todavía es una tarea pendiente. Salvo Pilar Dughi, que tanto en reconocimiento como en difusión —la reunión de sus cuentos completos en un solo volumen y la reedición de su única novela Puñales escondidos han visto la luz el 2017— forma parte de los nombres claves de ese periodo, aún es necesario aproximarse a autoras como Mariella Sala (1952), Viviana Mellet (1959), Carmen Luz Gorriti (1951), no tan conocidas por el público amplio. Así mismo, es crucial recuperar a una narradora como Patricia de Souza (1964), cuya escritura es, tal vez, una de las apuestas más (di)solventes en la narrativa peruana actual, pese a ser poco conocida por el lector promedio en el país.

En ese sentido, la creación de espacios de difusión y debate sobre la producción narrativa de las escritoras durante la década de los ochenta y noventa resulta sumamente afortunada. El Centro de Estudiantes de Literatura de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (CELIT), dentro de esa larga tradición de apertura al conocimiento que caracteriza a la Decana de América, organizó un Seminario-taller centrado en releer a esas autoras y ubicarlas dentro de sus respectivos contextos, así como en descifrar cuáles son las problemáticas que atraviesan sus obras. Este evento formó parte de la oferta de los talleres de otoño que este centro de estudiantes ofreció a los interesados de manera gratuita, sin duda, aprovechando las ventajas que ofrece la comunicación digital. Este espacio, en mi opinión, ha sido una oportunidad única para repensar la importancia de algunas narradoras en el periodo trazado y cuestionar algunas de las ideas que se han ido sedimentando sobre la narración en este periodo (Niño de Guzmán, 1986; Yushimito, 2013).  

Este seminario-taller estuvo a cargo de Nicole Fadellin, doctora en Literatura Hispanoamericana por la Universidad de Wisconsin-Madison. La Dra. Fadellin es especialista en literatura caribeña y literatura latinoamericana con énfasis en temas de colonialidad, género y materialidad a fines del siglo XX y comienzos del siglo XXI. Además, en nuestro medio, se desempeña como investigadora y co-curadora del proyecto digital Memoria Perú: Recorridos por el patrimonio de la Biblioteca Nacional del Perú (2021). Asimismo, colabora activamente con la Casa de la Literatura. Por ejemplo, fue co-curadora de la exposición La vida sin plazos: Escritoras en la ciudad de los 90 (2020) y ha dirigido diversos talleres, tales como Pioneros y pioneras de la ciencia ficción (2019), el Wikitón #YoLeoAutorasPeruanas (2020) y Escribir para existir: un acercamiento a la obra de Patricia de Souza (2020), actividades que demuestran su compromiso con la literatura escrita por mujeres en nuestro medio.

La duración del seminario a cargo de la Dra. Fadellin fue de tres semanas, todos los martes y jueves, los días 11, 13, 18, 20, 25 y 27 de mayo. El evento contó con la participación de alrededor de treinta participantes, un público de formaciones y edades heterogéneas, así como de intereses múltiples. Para el desarrollo de esta actividad académica, se puso a disposición de los participantes un corpus de cuentos y novelas escritos por mujeres durante el periodo estudiado. Asimismo, se propuso una programación definida, con contenidos específicos para cada sesión, que incluían un marco de referencia que sirvió para insertar los relatos analizados, y fuentes secundarias de respaldo a fin de situar y complejizar la lectura. Por otro lado, la metodología empleada se basó en la discusión de las fuentes primarias, a partir de la consideración de diversos niveles de lectura y el diálogo permanente con los materiales de apoyo, siempre con la intervención oportuna de la panelista. La discusión versó sobre asuntos como la posibilidad de una “escritura femenina”, los vasos comunicantes entre la literatura fantástica y la mirada de género, la especificidad de una “mirada femenina” al abordar la violencia política.  

En mi opinión, el curso satisfizo dos objetivos específicos. En primer lugar, ha servido para complejizar el panorama de la narrativa escrita durante de las décadas de los ochenta y noventa al incluir un conjunto de obras que no siempre se consideran dentro de los recuentos oficiales, así como las problemáticas que implican temas como la domesticidad, lo fantástico, la rutina en el contexto neoliberal, el periodo de violencia política o la descomposición de la subjetividad desde una perspectiva de género. El abordaje propuesto ha servido para repensar aquellos supuestos que, en algunos casos, han contribuido a restringir el acceso a las obras que escapan de estos criterios, por lo general androcéntricos. En segundo lugar, este seminario devino en un espacio de gestación de lecturas inéditas o sugerentes sobre autoras y temáticas que no siempre reciben la atención debida. En ese aspecto, las hipótesis de lectura de la Dra. Fadellin han resultado enriquecedoras, aspecto potenciado por la diversidad de opiniones y perspectivas puestas en juego durante las charlas. Como aspecto adicional, el seminario ha servido para repensar la importancia de una autora como Patricia de Souza, cuya obra narrativa y ensayística resulta clave para entender fenómenos como la autoficción y la fragmentación del yo en la narrativa peruana contemporánea, sobre todo con su novela El último cuerpo de Úrsula (2000). 

 Luego de terminado este evento, únicamente queda agradecer a la Dra. Fadellin por su tiempo, dedicación y generosidad al compartir información bibliográfica y los materiales que sirvieron de base para esta experiencia de lectura, que sin duda contribuye a ampliar la mirada sobre los procesos y metamorfosis de la narrativa peruana última. Próximamente, esta especialista conducirá el Seminario virtual: Pensadoras peruanas y cambio social (1843-1933) en la Casa de la Literatura Peruana. Auguramos todos los éxitos para este siguiente proyecto. Asimismo, cabe felicitar al Centro de Estudiantes de Literatura de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos por haber gestionado la realización de este curso de manera gratuita, en un intento de facilitar la lectura de una zona poco conocida y valorada de nuestra tradición literaria. Esperamos que en el futuro se siga apostando por la realización de reuniones de este tipo. 


Anexo: 

Algunas de las obras revisadas


- De Souza, Patricia. (2011). Eva no tiene paraíso. Lima: Ediciones Altazor.


- De Souza, Patricia. (2009). El último cuerpo de Úrsula. Lima: [sic].


- Dughi, Pilar. (1998). Puñales escondidos. Lima: Banco Central de la Reserva.


- Mellet, Viviana. (1994). La mujer alada. Lima: PEISA.


- Ollé, Carmen. (1992). ¿Por qué hacen tanto ruido? Lima: Flora Tristán.


- Sala, Mariella. (2019). Desde el exilio. Lima: Cocodrilo Ediciones. 


- Silva Santisteban, Rocío. (1994). Me perturbas. Lima: El Santo Oficio.


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